En este 2020 las personas y empresas hemos aprendido a vivir, trabajar, estudiar, hacer deporte y llevar diversas actividades en un contexto diferente al que dejamos atrás a principio de este año. Este cambio tan repentino se presentó sin avisarnos y dio paso a nuevas estrategias de adaptación y prevención.
Con la emergencia sanitaria derivada del COVID-19 el mundo cambió y con ello también la forma de hacer negocios, trayendo repercusiones económicas, sociales culturales y políticas. Ante esto, algunas empresas han generado y fortalecido oportunidades de Responsabilidad Social.
Algunas de las buenas prácticas que se han reflejado es la estrategia en la donación de productos de las empresas que producen y comercializan equipos de protección personal o productos de limpieza.
Gracias a estas prácticas el IMSS se ha visto beneficiado al recibir siete veces más de lo que recibe la Fundación en un año. Hasta el momento las donaciones representan 725 millones de pesos en especie y efectivo. El director general de este Instituto ha recalcado la importancia del trabajo de la Fundación IMSS fue fundamental en la operación y logística de las donaciones.
Dentro de las empresas que han hecho donaciones destacan Grupo Bimbo, donando lunch boxes al personal médico de los hospitales públicos, cubrebocas de tela a los dueños de tiendas, además se encargará de ofrecer programas de desarrollo emprendedor posterior a la pandemia.
La Fundación Carlos Slim, MetLife y Grupo Coppel han donado millones de pesos a instituciones de salud para apoyar a los médicos y pacientes durante la emergencia sanitaria, destinados al Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, Hospital General de México y la Cruz Roja Mexicana, entre otros.
Ante el desabasto del gel antibacterial Grupo Modelo, Bacardí y Grupo México donaron alcohol para la fabricación del gel desinfectante y así evitar la propagación del virus.
Algunas compañías tecnológicas también han puesto su granito de arena. Como Google, Amazon, Twitter y Facebook, donando millones de dólares para apoyar negocios, organizaciones y trabajadores de la salud. También se han hecho donaciones de pruebas para Covid-19, mascarillas y trajes protectores a países vulnerables africanos, por parte de Alibaba, Roche y Apple.
Por otra parte, al ver la necesidad de fabricación de ventiladores y equipos médicos, compañías fabricantes de automóviles como Rolls Royce, General Motors, Ford Motors Co y Lamborghini detuvieron su producción para manufacturar el material necesario para atacar y mitigar la pandemia.
Pero no todo se concentra en las grandes empresas, pues las tiendas de autoservicio, restaurantes, tiendas, papelerías, estéticas y más han implementado una serie de medidas de limpiezas y filtros al ingreso del establecimiento, al igual que barreras de protección entre empelados y clientes, con la finalidad de disminuir el riesgo de contagio.
No debemos bajar la guardia, pues esto aún no ha acabado. La Responsabilidad Social es de todos; así como muchas empresas han logrado establecer un equilibrio entre sus ganancias y las relaciones con sus clientes, también nosotros, desde nuestra trinchera, podemos generar un cambio para evitar más contagios.
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